Tres partes tiene este libro. Tres voces que se levantan claras y distintas para cobrar amplitud y convergir en un solo discurso apasionante.
El centro del discurso es una entrevista de gran interés que Claude Couffon acordó a la prensa -entre otros, a un fantasma- en Quito, en noviembre del 2003, y, misteriosamente, no llegara a publicarse. Se trata de una visión panorámica de la literatura ecuatoriana del siglo XX bajo el criterio de uno de los especialistas de la literatura hispanoamericana más autorizados. Los temas centrales de la entrevista llevan a Rocío Durán-Barba a dar espacio, en estas páginas, a otras dos voces:

Al reportaje sobre la muerte de Federico García Lorca que publicó Claude Couffon en París en 1951 –y le valió renombre internacional-. Tema que ha vuelto a la actualidad con el descubrimiento de nuevas fosas comunes en Granada, y la polémica en torno a la posibilidad de identificar el cadáver del poeta.
Y, a una reflexión sobre la gran repercusión que tuvo la literatura ecuatoriana en Francia cuando se impuso, en el universo de las letras, “el indigenismo”. Una corriente que impactó, sobre todo con la irrupción de las novelas del ecuatoriano Jorge Icaza.
'Además, he tenido la suerte de recuperar una entrevista inédita a Icaza, realizada en París en 1961, en la que comenta asuntos a los que nunca hizo referencia en el Ecuador', dice la autora. 'Estoy segura de que será importante para los especialistas, así como para todos los que nos interesamos en la memoria de nuestros escritores.'